sábado, 27 de abril de 2013

Hoja-Flor-Fruto-Semilla

La hoja. Es el órgano aplanado mediante el cual la planta realiza las funciones de elaboración de sus alimentos, respiración y transpiración. Las hojas son, generalmente, aéreas, planas y verdes debido a la presencia de el pigmento llamdo clorofila. Origen Nacen en los nudos del tallo principal y de sus ramificaciones; se originan de una yema. En la hoja se distinguen; limbo, pecíolo y vaina.
Limbo o lámina es la parte ensanchada de la hoja donde se cumplen las diferentes e importantes funciones de la planta; presenta una cara ventral (superior) lisa y una cara dorsal con nervaduras que sobresalen. El pecíolo es el cabillo o parte delgada, de forma acanalada, cilíndrica o aplanada que une el limbo con el tallo por medio de un ensanchamiento llamado vaina. Su función es la de acomodar el limbo a la luz solar y permitir la conducción de la savia por los haces de conducción que la recorren. El pecíolo y la vaina pueden faltar en la hoja. Si carece de pecíolo, la hoja se llama sésil o sentada. A veces la vaina abraza al tallo y la hoja es envainadora. Las nervaduras están formadas por haces de fibras que conducen la savia, estos son los haces de leño y liber que forman el esqueleto de la hoja y conducen la savia. Si la hoja tiene una nervadura es uninervada (como en el pino); si tiene varias, es plurinervada (como en la caraota); si no se ramifican, es simplicinervada (como en el junquillo); si se ramifican, es retirnervada (como en la violeta), etc.

Clasificación Al describir una hoja deben tenerse en cuenta todos los caracteres que presenta. Esto nos permite clasificarlas por: el borde del limbo, la forma del limbo, el pecíolo, la vaina, las nervaduras, etc.

Clasificación de las hojas: Según el limbo: Por el borde: entera, dentada, aserrada, festoneada, lobulada, hendida, partida. Por la forma: circular, oval, elíptica, sagitada, astada, lanceolada, acicular, ensiforme, acintada. Según el pecíolo: peciolada, sentada. Según la vaina: envainadora Según la nervadura: uninervada o plurinervada. Estructura celular.

Las células fotosintéticas de las hojas son células parenquimáticas que forman dos tipos de tejidos: parénquima en empalizada, constituido por células alargadas y empaquetadas ubicadas justo por debajo de la superficie superior de la hoja, y parénquima esponjoso, que consiste en células situadas en el interior de la hoja y con grandes espacios intercelulares. La mayor parte de la fotosíntesis ocurre en las células en empalizada, que están especializadas en la captación de la luz. El parénquima en empalizada y el parénquima esponjoso constituyen el tejido fundamental de la hoja, conocido como mesófilo. El mesófilo está envuelto por las células epidérmicas, que forman una cubierta, la cutícula, sobre la superficie externa de la epidermis. Las células epidérmicas y la cutícula son transparentes, lo que permite que la luz penetre en las células fotosintéticas. Las sustancias entran y salen de las hojas a través de dos estructuras completamente diferentes: los haces vasculares y los estomas. El agua y los minerales disueltos son transportados a las hojas, y los productos de la fotosíntesis son transportados fuera de ellas, por medio de los haces vasculares. Los haces vasculares atraviesan los pecíolos y se continúan con los tejidos vasculares del tallo y la raíz.











Funciones de la hoja
Las hojas desempeñan las funciones de fotosíntesis, respiración y transpiración..

Fotosíntesis.
Los vegetales están constituidos por sustancias orgánicas (contienen carbono). El ambiente en que viven está formado por sustancias inorgánicas (agua, sales, anhídrido carbónico). Son capaces de transformar las sustancias inorgánicas en orgánicas. Mediante la fotosíntesis los vegetales verdes (tienen clorofila), en presencia de la luz solar (fuente de energía), son capaces de extraer del aire ambiental el anhídrido carbónico, uniendo a sustancias inorgánicas (el agua, principalmente), creando o sintetizando sustancias orgánicas que contienen carbono y agua. Esta función elimina oxígeno por los estomas. Mientras la savia en bruto lleva sustancias minerales, la savia elaborada lleva las sustancias orgánicas formadas por la hoja y por todos los órganos que poseen clorofila. Formadas las primeras sustancias orgánicas (almidón y azúcar) se obtienen otras nuevas sustancias por combinaciones entre las ya existentes, el agua y las sales minerales que ésta lleva en disolución. Respiración La respiración es una función de nutrición por la cual la planta absorbe oxigeno del ambiente y exhala anhídrido carbónico, con producción de energía y agua. La realizan todas sus células. También intervienen enzimas que facilitan las reacciones químicas. El mecanismo de la respiración es inverso al de la fotosíntesis. Transpiración

La transpiración es una función de la nutrición mediante la cual la planta se desprende, en forma de excedente de agua que absorben las raíces. Los pelos absorbentes de la raíz permiten la entrada de una cantidad excesiva de agua necesaria para disolver las sales del suelo. Este exceso de agua es beneficioso para la circulación de la savia ascendente, pues la hace menos densa, pero es innecesaria y hasta perjudicial para la planta, por lo cual ésta la elimina en forma de vapor en la transpiración. Algunos factores exteriores influyen en la mayor intensidad de la transpiración: el menor grado de humedad de la atmósfera, el aumento de temperatura y el viento, el aumento de cantidad de agua disponible en el suelo; también los factores interiores: edad del vegetal, numero de estomas, grosor del tejido epidérmico y permeabilidad de este, y la realización simultanea de la fotosíntesis.



La Flor.
La flor reúne los órganos sexuales de la planta. Una flor hermafrodita típica consta de cuatro ciclos florales: el cáliz, la corola, el gineceo y el androceo. El cáliz esta formado por los sépalos, generalmente verdes. Entre sus funciones se encuentra la de brindar protección al pimpollo. La corola está compuesta por los pétalos, por lo general de colores llamativos. Constituye el elemento de atracción de los polinizadores. El gineceo reúne a las estructuras reproductivas en el llamado pistilo, que incluye el estigma, el estilo o tubo y el ovario que contiene a los óvulos y originará el fruto. El Androceo reúne a las estructuras reproductivas masculinas. Está compuesto por los estambres que están formados por los filamentos y las anteras, donde se encuentran los granos de polen. Muchas veces, las flores de las angiospermas se reúnen en inflorescencias. Polinización y Fecundación en la Flor.

Las flores contienen las estructuras necesarias para la reproducción sexual. La parte masculina es el estambre, formado por el filamento y la antera. La parte femenina, el carpelo, incluye el estigma, que recoge el polen; el ovario que contiene el óvulo; y el estilo, un tubo que conecta el estigma con el ovario (A). El polen es producido en la antera (B) y cuando está maduro es liberado (C). Cada grano de polen contiene dos gametos masculinos. Cuando tiene lugar la autopolinización el polen llega al estigma de la misma flor, pero en las plantas con polinización cruzada (la mayoría) el polen es transportado por el aire, el agua, los insectos o pequeños animales hasta una flor distinta. Si el polen alcanza el estigma de una flor de la misma especie, se forma un tubo polínico que crece hacia abajo por el estilo y transporta los gametos masculinos hasta el óvulo (D). Dentro del saco embrionario del óvulo, un gameto masculino fecunda la ovocélula y forma un cigoto que da lugar al embrión. El segundo gameto masculino se une a dos células del saco embrionario llamadas núcleos polares para formar el endospermo nutritivo que rodea el embrión de la semilla (E). Evolución de la Flor.
Las primeras gimnospermas de las cuales evolucionaron las angiospermas probablemente eran polinizadas mediante el viento, como lo hacen las gimnospermas modernas. Y también como en las gimnospermas modernas, el óvulo probablemente exudaba gotitas de savia pegajosa en las que quedaban atrapados los granos de polen y eran llevados al gametofito femenino. Los insectos, principalmente coleópteros y moscas, que se alimentan sobre las plantas, deben haberse encontrado con los granos de polen ricos en proteína y las gotitas azucaradas y pegajosas. Se cree que la flor primitiva se asemejaba a la de una Ranunculácea, que posee numerosas piezas florales, cada una separada de las otras. Comparando este tipo de flor con algunas de las más especializadas es posible ver cuatro tendencias principales en la evolución de la flor: 1 - Reducción en el número de piezas florales. Las flores más especializadas tienen pocos estambres y pocos carpelos. 2 - Fusión de piezas florales. Los carpelos y los pétalos, en particular se han fusionado, a veces de manera intrincada. 3 - Elevación de las partes florales libres por encima del ovario. En la flor primitiva, las piezas florales aparecen en la base del ovario. Se dice que estos ovarios son súperos. En las flores más evolucionadas, las porciones libres de las piezas florales están por encima del ovario: se dice que estos ovarios son ínferos. Esta es una adaptación importante, mediante la cual se cree que los óvulos fueron protegidos de los insectos forrajeros. 4 - Cambios en la simetría. La simetría radial de la flor primitiva ha dado lugar, en las formas más avanzadas, a formas con simetría bilateral. Una flor que atrae solamente a unos pocos tipos de visitantes animales y los atrae regularmente aventaja a las flores visitadas por polinizadores más promiscuos: es menos probable que su polen se desperdicie en una planta de otra especie. A su vez, es una ventaja para un animal el tener un depósito "privado" de alimento que sea relativamente inaccesible a especies competidoras. Muchas de las características distintivas de las flores modernas son adaptaciones especiales que estimulan las visitas regulares (constancia) de polinizadores particulares.


El fruto, producto de la transformación de la flor.

El fruto es en lo que se convierte el ovario una vez fecundados los primordios seminales y tras un periodo de madurez. En él se encuentran, por tanto, las semillas y su principal
función es proteger y dispersar a tales semillas. Las paredes del fruto, que son el resultado del desarrollo del o de los carpelos es el denominado pericarpo. Se divide en tres capas: Epicarpio (Exocarpo), Mesocarpio y Endocarpio. Epicarpio (Exocarpo). Es la parte externa del fruto Mesocarpio. Es la parte media. En los frutos carnosos constituye frecuentemente la pulpa o carne del fruto. Endocarpio. Es la capa interna. Rodea directamente a las semillas, sirve a menudo para la protección de éstas, y en algunos casos puede ser muy dura y de consistencia pétrea formando el llamado hueso (pireno) en los frutos de tipo drupa.


Clasificación de los frutos

Varios son los criterios que pueden aplicarse. Resulta natural tener en cuenta para ello si el pericarpio es seco o carnoso cuando el fruto llega a la madurez, y si en ese estado se abre dejando salir las semillas, o no se abre y las acompaña en su dispersión.
De acuerdo con esto el fruto se clasifica en seco y carnoso.
Seco.
Responde al carácter de pericarpio membranosos y falta de sustancias de reserva en sus parénquina (mesocarpio). Dentro del tipo se distinguen dos grupos: Posee varias semillas, el pericarpio se abre a la madurez, es dehiscente. Posee una semilla, el pericarpio no se abre a la madurez, es indehiscente. Carnoso .
Responde al carácter de pericarpio carnoso con abundante sustancias de reserva en su parenquina. Es indehiscente. Dentro del tipo se distinguen dos frutos: Posee varias semillas y su pericarpio es suculento. Posee una semilla y tiene un mesocarpio carnosos y un endocarpio leñosos.


La Semilla.

La semilla tiene tres partes principales: el embrión, formado por células que darán lugar a las estructuras de la planta adulta (raíz, yemas, tallos, hojas). Los cotiledones, uno en las monocotiledóneas y dos en las dicotiledóneas, son órganos de absorción que toman nutrientes de las reservas de la semilla. En las monocotiledóneas, este tejido se llama endospermo. En las dicotiledóneas, los cotiledones actúan como tejido de almacenamiento. La testa es una capa externa que protege las anteriores estructuras y evita la pérdida de agua. En el embrión de las gimnospermas con frecuencia existen varios cotiledones

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viernes, 19 de abril de 2013

Unidad V: División del trabajo de los órganos en las cormófitas

La Raíz

Las raíces son estructuras especializadas que fijan la planta al suelo e incorporan agua y minerales esenciales. La raíz embrionaria, o radícula, es la primera estructura que rompe la cubierta de la semilla y se alarga rápidamente. La estructura interna de la raíz de las angiospermas es simple. En las dicotiledóneas y en la mayoría de las monocotiledóneas los tres sistemas de tejidos (dérmico, fundamental y vascular) están dispuestos en tres capas concéntricas: la epidermis, la corteza o córtex y el cilindro central o cilindro vascular. Las raíces jóvenes tienen una capa externa de epidermis y, a lo sumo, una cutícula muy delgada. Prolongaciones de las células epidérmicas forman los pelos absorbentes, que aumentan la superficie absorbente de la raíz. Debajo de la epidermis la corteza (córtex), compuesta principalmente por células especializadas en el almacenamiento. La capa más interna de la corteza es la endodermis, una sola capa de células especializadas.

La raíz se diferencia del tallo por su estructura, por el modo en que se forma y por la falta de apéndices, como yemas y hojas. La primera raíz de la planta, llamada radícula, se alarga cuando germina la semilla y forma la raíz primaria. Las raíces que se ramifican a partir de la primaria se llaman secundarias. En muchas plantas, la raíz primaria se llama pivotante, es mucho mayor que las secundarias y alcanza mayor profundidad en el suelo. La remolacha y la zanahoria son ejemplos característicos de plantas con gruesas raíces pivotantes. Algunas especies con raíces de este tipo son difíciles de trasplantar, porque la rotura de la raíz primaria determina la pérdida de casi todo el sistema radicular y la muerte de la planta. Las raíces que brotan de los tallos se llaman adventicias. Se ven estas formaciones cerca de la base del tallo ya que se originan de cualquier parte menos de la radícala, un ejemplo de estas raíces es la que produce la yedra venenosa, estas raíces cortas tienen estructuras terminales planas que permiten fijarse. Cuando brotan de puntos más altos, las raíces adventicias se llaman aéreas, y ayudan a sujetar la planta, como se observa en el banano, el mangle y ciertas orquidáceas. Las plantas parásitas usan unas modificaciones de la raíz llamadas haustorios un ejemplo de esto es la cúscuta, se fija al tejido vascular de sus hospederos gracias a estas modificaciones que les permite suprimir el abastecimiento de agua y nutrientes. Al contrario de las parásitas, estas no obtienen beneficio de la planta que lo sostiene. Además existen plantas hemiparásitas, es decir que toman sus nutrientes del organismo huésped, y producen parte de su propio alimento. Las raíces, de acuerdo al medio donde se desarrollan, pueden ser: •Aéreas •Acuáticas •Terrícolas

Por su duración las clasificamos en: •Raíces anuales •Raíces perennes (herbáceas y leñosas) •Raíces bianuales









El Tallo

Es la porción del eje de la planta que sostiene las hojas, se desarrolla a partir de la plúmula del embrión y se caracteriza por la presencia de nudos y entrenudos. En cada nudo se encuentra una o varias hojas, hojas modificadas o cicatrices de hojas. La región entre dos nudos constituye un entrenudo.En el ápice y en las axilas (de una hoja o superior a la cicatriz de ésta) se encuentran las yemas. Algunas yemas axilares pueden ser modificadas, las yemas son estructuras no desarrollada de los tallos. Se clasifican por su posición u origen (terminales, axilares, accesorias o adventicias); por su actividad (activas o latentes) y por su contenido (foliar, floral o mixto).La función del tallo esta relacionada con el transporte de agua y nutrientes a través de la planta, además sirve como sitio de reserva de asimilados y sostén de las partes aéreas.

Clases de tallos:

Desde el tiempo de los antiguos botánicos griegos como Teofrasto y hasta el siglo XVII, la división clásica de las plantas establecía, según la estructura del tallo, tres grupos: hierbas, arbustos y árboles.

Los tallos pueden ser epigeos, si se desarrollan en el aire, hipogeos o subterráneos, cuando lo hacen enterrados; en este caso se les da los nombres de rizomas, tubérculos o bulbos.

Anatomía. Los meristemos apicales son los generadores de los primeros tejidos del tallo, de la raíz y de los apéndices (hojas). Los tejidos primarios son estructural y funcionalmente íntegros, al menos temporalmente, y conforman el cuerpo primario de la planta.Los tallos verdes, al igual que las hojas, tienen una capa externa de células epidérmicas cubiertas con una cutícula. La masa del tallo joven puede dividirse en un cilindro externo (la corteza) y un núcleo interno (la médula). Los tejidos vasculares consisten en floema y xilema. En las angiospermas, las células de conducción del floema son los miembros de tubo criboso, células vivas con paredes terminales perforadas, que forman tubos cribosos continuos. El tejido de conducción del xilema está constituido por una serie de traqueidas o vasos. Las traqueidas y los vasos se caracterizan por tener paredes secundarias gruesas y están muertos a la madurez funcional.






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sábado, 13 de abril de 2013

Gimnospermas y Angiospermas: Las Plantas Con Semilla

Traqueofitas con semillas
Las plantas con semillas existían cerca del final del período Carbonífero; de acuerdo con el registro fósil algunas de las plantas semejantes a helechos e inclusive algunos licopodios tenían estructuras semejantes a semillas. Los dos grupos modernos principales de plantas, son ambos plantas provistas de semillas: las gimnospermas, que tienen semillas desnudas, y las angiospermas (de la palabra griega angio que significa "vaso" (literalmente semilla en un vaso), que tienen semillas protegidas.





La semilla

La semilla es una estructura protectora por medio de la cual la planta embrionaria puede dispersarse y permanecer latente hasta que las condiciones se tornen favorables para su supervivencia. Una semilla incluye el embrión (el esporófito latente, joven), una reserva de tejido nutritivo y una cubierta protectora externa. Esta cubierta que deriva de tejidos del esporófito materno, protege al embrión mientras éste permanece latente, a veces durante muchos años, hasta que las condiciones sean favorables para su germinación.











Figura - Semilla. La semilla tiene tres partes principales: el embrión, formado por células que darán lugar a las estructuras de la planta adulta (raíz, yemas, tallos, hojas). Los cotiledones, uno en las monocotiledóneas y dos en las dicotiledóneas, son órganos de absorción que toman nutrientes de las reservas de la semilla. En las monocotiledóneas, este tejido se llama endospermo. En las dicotiledóneas, los cotiledones actúan como tejido de almacenamiento. La testa es una capa externa que protege las anteriores estructuras y evita la pérdida de agua. En el embrión de las gimnospermas con frecuencia existen varios cotiledones.





Gimnospermas

Las gimnospermas son plantas vasculares y productoras de semillas. Se las llama así debido a que las semillas de estas plantas no se forman en un ovario cerrado (esto es, un pistilo con uno o más carpelos que evolucionan a un fruto, como ocurre en las angiospermas), sino que están desnudas en las escamas de los conos. La adquisición evolutiva más importante de las gimnospermas con respecto a las pteridofitas es la presencia de semillas, estructuras que contienen y protegen el embrión. Por lo general, son árboles leñosos, de hojas perennes, con tejidos de conducción formados por traqueidas, que son vasos de conducción. Los representantes típicos son los pinos, cedros, abetos. El tallo es robusto, leñoso y muy desarrollado. Consta de una eje central del que se desprenden ramas laterales más largas en la parte inferior, y que disminuyen hacia el ápice, lo que le da un aspecto piramidal. Sus hojas, de color verde intenso, son delgadas, y por lo general, aciculares (en forma de aguja), con una sola nervadura. Se ubican en pequeñas ramas cortas, y presentan cutícula gruesa que las protege de la pérdida de agua. Actualmente se distribuyen en regiones templadas y frías y pueden alcanzar grandes dimensiones o bien presentar un aspecto semejante a los helechos o palmeras, como las Cycas. Muchas gimnospermas tienen sexos separados, es decir, son plantas dioicas, femeninas o masculinas; otras son monoicas, portadoras en un mismo pie de ambos sexos.



Ciclo Reproductivo en Gimnospermas Todas las gimnospermas son heterosporas y producen dos tipos diferentes de esporas en dos tipos diferentes de esporangios. Las esporas que originan los gametofitos masculinos se conocen como microsporas y se forman en estructuras conocidas como microsporangios. Las esporas a partir de las cuales se desarrollan los gametofitos femeninos, se conocen como macrosporas y se forman en los megasporangios. Un megasporangio origina por meiosis a una macrospora, y está rodeada por una o dos capas de tejido, el tegumento. La estructura completa (el megasporangio, su tegumento protector y su contenidos) se conoce como óvulo.


Ciclo reproductivo de una Gimnosperma Simplificado Tipos de Gimnospermas


Durante el período Pérmico las gimnospermas se diversificaron. Cuatro grupos de gimnospermas tienen representantes vivos: 3 divisiones pequeñas (Cycadophyta, Ginkgophyta y Gnetophyta) y una división grande y familiar (Coniferophyta). Las coníferas ("portadoras de conos") incluyen los pinos, abetos, araucarias, cipreses, cedros, tsugas del Canadá, cipreses, juníperos y las secuoyas gigantes de California y Oregon.























Angiospermas

Las Angiospermas constituyen un grupo muy numeroso de plantas. Viven en casi todos los ambientes bajo diferentes condiciones climáticas y su origen se remonta a más de 100 millones de años, durante el período Cretácico de la era Mesozoica. Presentan un aspecto muy variado en cuanto a su forma, tamaño y estructura, pero lo que las caracteriza es la presencia de flores verdaderas con óvulos encerrados en una cavidad: el ovario, y semillas protegidas dentro del fruto. El surgimiento de las angiospermas se produjo junto al de los insectos polinizadores, como mariposas, avispas y abejas; relación que se mantiene hasta nuestros días.




Se cree que las angiospermas -plantas con semillas encerradas y protegidas- evolucionaron a partir de un grupo actualmente extinguido de gimnospermas. Las angiospermas, al igual que las gimnospermas, tienen megáfilos, estomas y una cutícula impermeable al agua. Las angiospermas incluyen no sólo a las plantas con flores bien visibles, sino también a los grandes árboles de madera dura, a todos los frutales, hortalizas, hierbas y gramíneas que son componentes básicos de la dieta humana y la base de la economía agrícola de todo el mundo. Estas plantas tremendamente diversas se clasifican en dos grandes grupos: clase de las Monocotiledóneas, con aproximadamente 65.000 especies, y clase de las Dicotiledóneas, con aproximadamente 170.000 especies.


Monocotiledóneas y Dicotiledóneas

Las angiospermas se dividen en dos grandes grupos: monocotiledóneas (embrión formado por un solo cotiledón) y las dicotiledóneas (embrión con dos cotiledones) Las semillas de las monocotiledóneas presentan diferencias con respecto a las dicotiledóneas, el embrión tiene radícula y el talluelo protegidos por membranas denominadas coleorriza y coleoptile, respectivamente, y un solo cotiledón. Las dicotiledóneas poseen dos cotiledones, dos masas carnosas que contienen sustancias de reserva que el embrión utiliza durante su crecimiento.

Botanica Fanerogamica